Variaciones sobre un tema desértico surge a partir de un estudio en torno a dos fenómenos artísticos: el western y el land art. El primero, género literario-cinematográfico; el segundo, parte de las corrientes situadas en los albores del arte contemporáneo. El proyecto se sitúa en la intersección de ambos: el paisaje del desierto. Pero más allá de establecer los puntos de encuentro y las líneas de separación entre el western y el land art, a través de la yuxtaposición se establece un vínculo que permite poner en movimiento las imágenes en cuestión, en donde el desierto no solamente es tema sino también el fondo en el que se funden la imaginería de ambos en una dialéctica de la dispersión, que finalmente es recapturada por el gesto pictórico.
